Uno de los debates más relevantes de las ciencias sociales y del diseño de políticas públicas en estos tiempos se da en torno a la posibilidad de configurar sistemas políticos que convienen el respeto a los derechos individuales con el reconocimiento a la diversidad cultural. El tema se ha vuelto cada vez mas fundamental, pues a la diversidad cultural presente en las comunidades políticas de las región se le suma la suscitada a propósito de las migraciones nacionales e internacionales, intensificadas en los últimos años.